El BCRA había obligado a las entidades financieras a otorgar sin costo una caja de ahorro y una tarjeta de débito a cada cliente, y a no cobrar cargos por transferencias por cajero o homebanking hechas por personas físicas y los dejó aumentar sólo hasta 20% el resto de las comisiones en la primera parte del año. Para compensar, las entidades aplicaron aumentos en servicios no regulados.
Ahora se viene una suba que redondearía un incremento de 50% anual. Los bancos deberán comunicarles las subas a los clientes con un plazo de 60 días de anticipación. Cuando se realice un aumento en el costo de los servicios que ofrece una entidad, se deberá informar también el precio que cobra la competencia por el mismo producto.