El equipo de campaña de Trump esperaba que la nominación formal pusiera fin a la discordia dentro del Partido Republicano y que eclipsara el caótico inicio de la convención, que incluyó acusaciones a su esposa Melania Trump de copiarle parte de su discurso a Michelle Obama, en la ceremonia inaugural de la convención.
El senador de Alabama Jeff Sessions inició con el proceso de nominación con un emotivo apoyo para Trump, declarándolo “un guerrero y un ganador”. Hubo momentos de discrepancia en la convención mientras los estados en los que no ganó Trump entregaban sus registros, pero el multimillonario se distanció por mucho de sus rivales en las primarias. Su estado natal, Nueva York, fue el que le dio la cifra requerida para la nominación.