Alcel Faugues un DT haitiano en Rosario |
En un principio, el idioma fue un obstáculo, pero aprendió rápido y junto a su esposa, que está a punto de recibirse de enfermera, constituyeron un hogar en Pichincha, donde crían a dos hijas argentinas.
Una vez recibido, Alcel fue con un amigo a ganar algo de experiencia a Renato Cesarini, trabajó en la Asociación Civil Club María Reina, y en el Club Atlético Provincial, donde pasó tres años. También dirige ocasionalmente al “FC Estudiantes Haitianos”, y actualmente forma chicos en Unión Americana.
Su vida estuvo signada por la tragedia que marcó a todos los haitianos y que fue el comienzo de su historia en el país. El terremoto de enero de 2010, lo encontró estudiando informática en la capital del país, Port-au-Prince. Tras el suceso surge la posibilidad de venir a Sudamérica.
“Con Argentina tenemos relación diplomática, no necesitamos visa para venir acá a estudiar, y yo me anoté en Medicina pero realmente vine para hacer el curso de Director Técnico Nacional de Fútbol.
"Vine directamente a Rosario porque no quería ir a otro lado, señala, y admite que fue tras la leyenda de Messi. Compartió el curso de DT con Lucas Bernardi, con quien pudo mantener diálogo fluido, ya que el ex técnico de Newell’s, vivió varios años en Francia, y habla su lengua a la perfección.
Alcel se recibió de Director Técnico Nacional de Fútbol en la Escuela Nº 115 de la Atfa (Asociación de Técnicos del Fútbol Argentino). Dice tener dos modelos nacionales a seguir en la dirección técnica son Marcelo El Loco Bielsa y el ‘Cholo’ Simeone. Se hizo hincha de San Lorenzo, a pesar de vivir en Rosario, pero nunca pudo estar el Nuevo Gasómetro.
Por los clubes de la ciudad siente especial simpatía dice, se identificaba con el juego del Newell's de Martino y reconoce le gusta el Central del Chacho, "aunque no tiene suerte". Consultado sobre sus experiencias futbolísticas, nos dice que le gusta el fútbol ofensivo, sin descuidar la defensa, el comienzo de todo buen ataque y que en el fútbol de hoy la parte física es fundamental, por eso ya en juveniles, desde los 12 años, los chicos tiene preparadores físicos.
Nos hizo notar que en su experiencia con los niños, pudo notar que muchas veces sus padres no mantienen la mejor conducta y que en ocasiones los presionan demasiado para que sean buenos jugadores y ciertamente, no todos lo serán. Comentó que es su deseo algún día dirigir equipos de mayores, pero no desespera, ya que se encuentra muy cómodo ejerciendo ese rol.
Admite que le gusta jugar con un 4-2-3-1 y que esa es su formación ideal. Por último nos dice entusiasta que "el fútbol es un juego, hay que aprender eso y transmitirlo a los niños, y no siempre gana el mejor, sino no sería divertido".