"Los costos de producción del tambo crecieron y la industria no los puede reconocer vía precios, ya que el consumo interno de lácteos cayó entre el 7 y 8% debajo de 2015", dijo Moreno en declaraciones al diario Clarín.
Al ser consultado sobre si la firma ya vivió otras crisis parecidas, Moreno contestó: "Se vivió parcialmente en 2002 pero el consumo se reacomodó rápido. Esta es la crisis más profunda que ha vivido el sector, porque además nos golpeó el clima, que castigó a Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos, con bajas en la producción de 15 a 20%".
Moreno rechazó las acusaciones de los tamberos que acusan al sector de la industrialización y comercialización de estar quedándose con la mayor parte de la rentabilidad mientras ellos trabajan con precios de quebranto.
"Es muy difícil que un empresario atente contra su negocio a través de un precio o un margen excesivo. No veo a quienes se apropien de rentas excesivas a costa del eslabón que les permite sostener su actividad", dijo el presidente de La Serenísima.