El partido fue extraño, tuvo un comienzo para el recuerdo, Argentina arrancó al frente, primero le sacó siete puntos y después diez, parecía un sueño que hasta por instantes nos hizo ilusionar con un nuevo batacazo, pero duró poco, el Dream Team ajustó las marcas y finalmente se impuso en el primer cuarto por cuatro.
De ahí en más mostró el vencedor su mejor cara, sacó a relucir su chapa de candidato a quedase con el oro y mostró todo su potencial. Pero Argentina no se quedó atrás, contestó cada avance, con menos precisión es cierto, con menor fortaleza física, y el conjunto norteamericano fue estirando ventajas y se quedó con el partido que lo clasifica para la próxima fase, donde se verá las caras con España.