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| Messi marcó el gol y fue figura del clásico del Río de la Plata |
El primer tiempo fue muy parejo, en el principio Argentina se mostró mejor, con buena combinaciones entre Messi, Di María y Pratto, la férrea marca de Mascherano en el medio y algunos chispazos de Dybala.
Uruguay esperaba, y metía a sus delanteros entre los centrales albicelestes. Cavani y Suarez se sacaban chispas con Funes Mori y Ottamendi. Una de las primeras conclusiones del equipo de Bauza es que hay un marcado deseo de rodear a Messi de compañeros y hacer recorridos cortos del balón.
Paulo Dybala estrelló un remate en el palo izquierdo de Muslera en un aviso albiceleste. Al rato Messi se sacó dos hombres de encima, enganchó para el otro lado y sacó un remate que se desvió en el camino y venció al arquero visitante, para marcar el 1 a 0. Faltando apenas el descuento para terminar la primera etapa, Dybala vio la roja por segunda amarilla, y esa expulsión condicionó el trámite del resto del cotejo.
En el segundo, Argentina disimuló con creces la ausencia de sus once jugadores. Messi tomó la posta, se hizo cargo del equipo, la pidió siempre, la puso abajo de la suela, y con su gambeta hizo pasar los minutos. Mascherano se agigantó, aguantó todo lo que vino y sacó toda su garra para contener los embates orientales.
Pratto, Di María y Biglia se sumaron a la patriada, corrieron cada pelota como si fuera la última y aguantaron un partido complicado. La impotencia uruguaya con el correr de los minutos los hizo perder el objetivo, golpearon por demás, y se olvidaron de atacar. Romero fue casi un espectador de lujo a pesar que su equipo jugó casi 50' minutos con uno menos. La era Bauza comenzó de la mejor forma, Argentina ganó, mostró momentos de buen fútbol y quedó primera en la eliminatoria, aprovechando la derrota de Ecuador.
