Se trata de los dos países más contaminantes del mundo, que juntos suman cerca del 40 % de las emisiones globales, con lo que su ratificación del pacto alcanzado en la capital francesa en diciembre pasado ayudará a estar más cerca de que se convierta en vinculante.
Para que el Acuerdo de París entre en vigor se necesita que al menos 55 países que sumen en total el 55% de las emisiones contaminantes globales completen el proceso de ratificación.