La decisión fue tomada por el juez del Supremo Tribunal Federal Teori Zavascki, quien rechazó así el último pedido de Rousseff ante la máxima corte para intentar suspender los efectos de la votación en el Senado.
Entre los argumentos, el magistrado dijo que no le cabe al tribunal interferir en una decisión política del Congreso y que no quedó representado un ataque o amenaza a las instituciones brasileñas.
La defensa de Rousseff negó la existencia de delitos de responsabilidad en el juicio político, motivado por supuesta violación a la ley fiscal, y acusó a su vicepresidente, Michel Temer, de ser el articulador junto con su aliado y ex presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, detenido ayer por corrupción.
