La iniciativa, que también lleva las firmas de las concejalas Daniela León y Lorena Giménez, propone el mismo destino para el Centro de Información, Archivo y Digesto que funciona junto a la biblioteca, y también pertenecía al Concejo.
En ese sentido, el edil peronista explicó que "tanto el material disponible en la biblioteca, como el que se halla en el centro de información, guardan íntima relación con la tarea legislativa", por lo que es natural que "sea el Concejo, como lo fue históricamente, el depositario y gestor de esas dependencias."
Asimismo, Toniolli denunció que "a las sucesivas mudanzas y cambios institucionales que atravesó la biblioteca en las últimas décadas, se le suma el hecho de que hoy resulta infructuoso para investigadores, estudiantes o público en general, acceder al material allí disponible, en la medida que suele permanecer cerrada, o se suelen interponer obstáculos burocráticos para la consulta de su patrimonio invalorable de obras, que – entre otros rubros - compilan leyes, doctrina y jurisprudencia de los tres niveles del Estado, en particular sobre Derecho Municipal”.
En lo que refiere al Centro de Información, Archivo y Digesto, el concejal señaló que “el acceso no es fluido ni siquiera para los ediles o sus asesores, que necesitan consultar permanentemente las decisiones del Ejecutivo traducidas a normas, y sin embargo no tienen esa posibilidad”, y concluyó: “trasladar el Centro de Información, en el que se archivan todas y cada una de las disposiciones administrativas del Municipio, al Concejo Municipal – que fuera su depositario original -, sería por lo tanto una medida de transparencia institucional”.
Fundada en 1934 como biblioteca del entonces Concejo Deliberante, se institucionaliza como Biblioteca Pública en 1950, y comienza a funcionar en 1° de Mayo 828 cuando el cuerpo legislativo se muda al Palacio Vasallo, en 1958. En 1994, cuando aún seguía dependiendo del Concejo, la biblioteca fue trasladada al entonces Centro Cultural Bernardino Rivadavia, y en 1998 se la trasladó nuevamente, en esta ocasión al edificio donde funciona el Digesto Municipal, ubicado en calle Juan Manuel de Rosas 848, sitio donde aún tiene su sede.
Luego de eso, en el año 2002, durante la Presidencia de Norberto Nicotra, el Concejo se desprende tanto de su biblioteca como del Centro de Información y Archivo, que pasan a funcionar bajo la órbita de la Dirección General de Gobierno del Ejecutivo, y hacia el año 2011 se unifican en una sola área referenciada como “Coordinación de la Biblioteca Pública Municipal Gral. San Martín”.
