Quizás el momento más caliente del debate de ayer se vivió cuando el candidato republicano le dijo a la demócrata “Qué mujer tan asquerosa”. Clinton hablaba sobre sus planes en política fiscal y su visión sobre la seguridad social.
Aunque fue un comentario impulsivo y sin motivo aparente, las palabras se suman a una larga lista de comentarios despectivos que el magnate ha hecho sobre la demócrata, a quien considera que debería estar incapacitada para presentarse a las elecciones por el escándalo relacionado al almacenamiento de sus correos electrónicos en un servidor privado durante su tiempo en el Departamento de Estado. Hillary Clinton