En las últimas semanas trascendió que los televidentes tendrían que pagar una suma cercana a los 300 pesos mensuales además del servicio de cable para poder ver los encuentros deportivos.
Desde el Gobierno salieron a ponerle paños fríos a la situación. Es que si bien no hubo confirmaciones, Peña no descartó la posibilidad de que las transmisiones continúen siendo sin cargos adicionales durante un tiempo más.
Para respaldar el panorama actual, sentenció que "en realidad el fútbol nunca fue gratuito, porque lo pagaba el Estado, y por tanto los ciudadanos". "Se paga con impuestos o con inflación o con deuda", consideró el funcionario en declaraciones con Radio Continental.