Asimismo, las autoridades advirtieron que tras las intensas lluvias de enero y febrero persisten “las condiciones de anegamientos, escurrimientos superficiales de agua y ascenso de las napas freáticas”. Ante este panorama, el gobernador Miguel Lifschitz firmó el decreto 559/17 junto al ministro de Infraestructura y Transporte, José León Garibay, y su par de Hacienda, Gonzalo Saglione.
El objetivo del mismo es “la urgente concreción” de “bacheos, reparaciones y rehabilitaciones de rutas provinciales pavimentadas“, así como también en los accesos, y la ejecución de obras especiales en rutas provinciales de calzada natural. Para esto, el Gobierno dispuso que la Dirección Provincial de Vialidad quede exceptuada de una serie de trámites referidos a los gastos para afrontar dichos trabajos y contrataciones.