Desde el Gobierno se espera que para el año 2020 la provincia salga de la deuda y presente superávit fiscal. Actualmente, el pasivo supera los $5.000 millones, que tendrá que ir descendiendo de acuerdo a metas pautadas en los próximos tres años. En los últimos meses, Santa Cruz tuvo problemas en los pagos de los sueldos de los empleados provinciales.
Luego de varias manifestaciones, paros de los estatales y hasta atrincheramientos a la gobernadora se les pudo pagar por adelantos de coparticipación girados por la Casa Rosada. Pero se trata de apenas un préstamo "puente", es decir, provisional. El objetivo es lograr una solución de fondo y para eso es indispensable que el gobierno provincial presente un plan de ajuste que vaya cumpliendo a lo largo de los próximos años.