En un estadio colmado, con el clásico fervor peronista y miles de personas en las tribunas, acompañadas por cientos de bombos y banderas, la precandidata a legisladora nacional hizo un encendido discurso durante el cual no ahorró críticas para el Gobierno Nacional, aunque también hizo referencia al "desgobierno socialista en la provincia, que permitió el avance inusitado del narcotráfico".
Rodenas criticó al neoliberalismo, que "vino a traer incertidumbre a los argentinos, que nos está dejando sin trabajo, y sin futuro" y resaltó que "la única manera de frenar a este proyecto de exclusión es organizando al movimiento obrero, dejando de lado las rencillas internas, mirando al futuro".
A modo de autocrítica, la ex magistrada señaló "todos los que estamos acá estamos orgullosos de muchas de las cosas que se hicieron, pero también sabemos que fallamos en varias cosas que deberemos corregir a futuro y esa será nuestra tarea". "Quiero pedirles que me ayuden a difundir que no me jubilé ni pedí licencia, tras 31 años en el Poder Judicial renuncié, para dedicarme a la política, me la jugué para estar acá".
Se encontraban presentes la totalidad de los senadores provinciales peronistas, gran parte del movimiento sindical, representados por los Municipales de Rosario, Unión del Personal Civil de la Nación, delegación Santa Fe (UPCN), Unión Obrera Metalúrgica de Rosario, Sindicato de Camioneros, entre otros.
Además se hicieron presentes referentes del Movimiento Evita, el secretario general de la Departamental Rosario y concejal Eduardo Toniolli, el ex diputado nacional Ángel Baltuzzi, y la diputada nacional Lucila De Ponti.