“Si no hubiera ninguna alternativa ni propuesta, nos queda abierta la vía de recurrir a la Corte Suprema”, explicó. Alaró que no espera “una solución inmediata” sobre los 40.000 millones de pesos que debe cobrar el Ejecutivo provincial y que tampoco pretende “complicar las finanzas del Gobierno nacional”.
Advirtió: “Necesitamos una respuesta porque es una deuda que no es con el Gobierno de Santa Fe sino con todos los santafesinos“.