El fin de semana Finoccachiaro se sinceró y explicó que de esos 3000 jardines de infantes que iban a recibir a más de 600.000 chicos en salas de 3 y 4 años antes de terminar el mandato de Macri, resulta que a un año y medio de gestión, el presupuesto destinado al cumplimiento de esa meta está subejecutado en grado extremo para construir unos 100 jardines.
“Debemos recordar que durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner fuimos junto a Roberto Sukerman a gestionar los jardines y playones deportivos para Rosario, ante el Ministerio de Educación de la Nación y luego la Municipalidad descartó la propuesta destinada a los niños”, argumentó López. Por otro lado, la concejala manifestó: “Ya pudimos ver cómo el socialismo y el PRO no articulan políticas públicas para el sector social más sensible como son niños y niñas.
EL PS descartó las medidas inclusivas del gobierno de Cristina Fernández por no visibilizarlas y ahora, en un marco de ajuste económico permanentemente como el que está implementando Macri, nos quedamos sin ninguna posibilidad de conseguir recursos. En este tema vemos nuevamente como el socialismo y el Cambiemos dejan desamparadxs a los más indefensos como son lxs niñxs”.
En 2009 presenté el proyecto y recién en 2016 fue aprobado para que Rosario cuente con Jardines Maternales Municipales, proyecto que años más tarde Pablo Javkin salió a anunciar con bombos y platillos, siendo vergonzoso que un ex concejal y actual Secretario de Gobierno de la Municipalidad pueda mentir de esta manera. Este ejemplo deja a las claras las falsas promesas del socialismo que además roba iniciativas ajenas”.
La edila agregó: “La institucionalización de los Jardines Maternales que se propone en esta ordenanza, redundará también en la generación de nuevas fuentes de empleo para quienes asuman las tareas de cuidadores y cuidadoras, y se deberá promover su formalización y profesionalización y la incorporación tanto de mujeres como de varones en estas tareas; pudiéndose complementar estos servicios públicos de cuidado con subsidios a la oferta privada”.
Para finalizar, Norma López, argumentó: “El cuidado es un derecho y el Estado tiene que asumir competencias como garante de la provisión y la regulación de servicios. Esto es un núcleo fundamental de la desigualdad de género, que se intensifican de acuerdo a las condiciones socioeconómicas y educativas. Cuando jefes y jefas de hogar salen a trabajar, los hermanos mayores deben quedar a cargo de los más pequeños. Esa situación en familias vulnerables generalmente deriva en trabajo infantil. Estas son las situaciones que necesitan políticas de Estado”.