"El promedio móvil de los últimos doce meses arroja un guarismo de 55,8 kilos por habitante por año en junio, que respecto a los doce meses atrás mostró una caída de 2,8 por ciento", indicó la entidad.
El mercado argentino había alcanzado el récord de consumo de carne por habitante en 2009, cuando el guarismo se ubicó en los 70,2 kilos. La línea descendente arrancó en 2014, cuando el consumo se había ubicado en 60,5 kilos per cápita; en 2015 retrocedió a 58,3 kilos; en 2016, a 57,5 kilos; y en 2017, 55,9 kilos.