La norma es una promesa de campaña del ahora presidente Emmanuel Macron, debido a que la contienda estuvo marcada por varios escándalos. El más conocido fue el que afectó al candidato de derecha François Fillon, quien se hundió en las encuestas y no logró pasar a la segunda vuelta presidencial. Eso, después de que la prensa asegurara que su esposa Penélope y sus hijos habían cobrado durante años sueldos como ayudantes parlamentarios, pese a que no había registro de su labor en el Legislativo.
Con la nueva ley, funcionarios, ministros, diputados y otros cargos de representación local no pueden contratar a su cónyuge, pareja, padres o hijos. Y si son descubiertos, enfrentan una pena de tres años de prisión y 45.000 euros de multa e, incluso, en algunos casos, la devolución de la suma pagada