“Es un beneficio que cambia la fisonomía del barrio y la vida de más de 1.500 vecinos y vecinas”, sostuvo el secretario General, Pablo Javkin. Estas tareas, que benefician a 1.500 vecinos y vecinas del lugar, entre ellos 350 frentistas, se llevaron adelante con maquinarias y herramientas adquiridas por el municipio, lo que permitieron mayor agilidad en el tiempo de ejecución de obra.
La intendenta Mónica Fein y el secretario General, Pablo Javkin, recorrieron junto a los vecinos las obras ya concluidas, que se enmarcan dentro del plan de pavimento a nivel definitivo que se lanzó a comienzos de año, que implica también la eliminación de zanjas, dándole un salto de calidad a estos barrios beneficiados.
"Hacia mucho tiempo habíamos realizado la red de cloacas de este barrio, y los vecinos nos venían insistiendo en eliminar la zanja y tener el pavimento definitivo. Hoy eso es una realidad, y seguramente surgiran nuevos desafíos a resolver juntos. Pronto tendrán un nuevo sistema de recolección de residuos, barrendero, seguramente avanzaremos con las luminarias, porque siempre queremos ir hacia adelante”, sostuvo Javkin.
El objetivo del plan 1.000 cuadras es mejorar las condiciones de transitabilidad y la capacidad de las calzadas existentes; incrementar la seguridad vehicular y peatonal; solucionar los problemas ambientales y sanitarios; y reducir los costos de mantenimiento de la red vial pavimentada.