El Sindicato Empleados de Comercio de Rosario asume esa jornada para el festejo y también para ejercitar la memoria. Como tantos otros días, hay una historia detrás. Historia de hombres con pasión, con sentido solidario. Historia de hombres íntegros que pusieron sus vidas al servicio de causas nobles y justas. Causas inherentes a la dignidad humana.
Es bueno aprovechar esta fecha para reflexionar sobre nuestra historia y sus innumerables enseñanzas. Es mejor saber de dónde venimos para vislumbrar más claramente hacia dónde vamos. El 26 de septiembre es un símbolo de esas luchas y por eso lo recordamos y conmemoramos año tras año.
Así quedó instituido en el Convenio Colectivo de Trabajo 130 de 1975 en su artículo 76°. Pero la fecha tiene su origen en la sanción de la Ley 11729, que se produjo el día 26 de septiembre de 1934, modificando los artículos 154 al 160 del Código de Comercio y estableciendo, entre otras cuestiones, el Régimen de Indemnizaciones por Despido, las Vacaciones Anuales Pagas, el Aguinaldo e introduce la regulación por accidentes de trabajo y la Licencia a Empleadas y Obreras en Estado de Gravidez.
El Proyecto fue presentado por el diputado socialista Enrique Dickman y, sin dudas, constituye la síntesis de las conquistas más caras para los trabajadores mercantiles y en su tiempo puso fin a interminables períodos de abusos y arbitrariedades laborales. Estudiar las causas de los retrocesos, para así encontrar caminos de lucha que nos permitan alcanzar nuestros objetivos, ese es el desafío de la hora.
PRENSA AEC