Con el argumento de evitar robos o complicaciones con el traslado de dinero, las tres empresas ya no reciben efectivo en sus sucursales, generando demoras en trámites como el abono de boletas atrasadas, convenios de pagos o reconexiones de servicios, obligando a los usuarios a dirigirse en primer lugar a las oficinas comerciales, y luego a un banco o a una empresa de cobranza.
Toniolli señaló que "las asociaciones de defensa del consumidor ya advirtieron que la normativa vigente en materia de derechos de los usuarios obliga a las empresas a admitir todas las formas de pago", y señaló que solicitará la aprobación sobre tablas de la iniciativa en la sesión del Concejo Municipal que se realizará mañana, a fin de que el Ejecutivo inicie inmediatamente las gestiones ante las tres empresas.