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"Estas obras, que son financiadas desde la gestión provincial y proyectadas por la municipalidad de Rosario, tienen como objetivo principal disminuir el riesgo hídrico en la zona a través de la optimización del escurrimiento pluvial", precisó el ministro de Infraestructura y Transporte, José Garibay.
Al respecto, agregó que “estas obras de infraestructura son fundamentales para la ciudad de Rosario. El gobernador Miguel Lifschitz nos ha encomendado la tarea de realizar obras que escapan muchas veces a presupuesto locales y que dejan un sello para los ciudadanos”, observó.
En tanto, la secretaria de Obras Públicas de Rosario, Susana Nader, mostró su optimismo por “trabajar par a par con el gobierno provincial para generar mejores condiciones en los barrios del noroeste de la ciudad”, y dijo que “hace 30 años que la municipalidad viene cumpliendo un plan Integral Hidráulico para garantizar la seguridad de sus habitantes.
Estos trabajos forman parte de un plan hidráulico muy ambicioso coordinado junto a la provincia para modificar los barrios de la ciudad y a la vez estar preparados para situaciones de imprevisión climática”, agregó.
