"Mi padre vivió una vida excepcional e impactante como pionero mediático, y como líder de algunos de los movimientos culturales más significativos de nuestro tiempo", ha dicho su hijo Cooper en un comunicado de prensa.
Con el mantra de "la vida es muy corta para vivir el sueño de otro", la revista que se convirtió en mucho más que una publicación, se ha despedido en Twitter del hombre que la fundó allá por 1953 con apenas 8.000 dólares en el bolsillo.