Están previstas también marchas en varias grandes ciudades del país, sobre todo en Marsella, en el sureste. La CGT, uno de los principales sindicatos franceses, estará en primera línea de las manifestaciones, en la víspera de la presentación de las ordenanzas en consejo de ministros, para una aplicación casi inmediata.
Estas nuevas protestas se producen una semana después de que decenas de miles de franceses -200.000 según la policía, medio millón según los organizadores- se manifestaran en toda Francia contra esta reforma que implicaría según ellos una “regresión social”.