“Es muy grato volver siempre a este acto. Rosario es una ciudad que tiene una rica historia, la ciudad del puerto, de las primeras exportaciones, agraria, del progreso, vinculada al esfuerzo, el trabajo, el emprededurismo, la innovación y el desarrollo cultural”, señaló el gobernador al pie del Monumento Nacional a la Bandera.
"Rosario ha sabido encontrar un camino de planificación participativa, de articulación público - privada, con proyectos de futuro”, explicó Lifschitz y añadió que “es una ciudad cosmopolita, orgullosa de esa identidad cultural, con políticas claras de promoción de esa vida cultural, que es un sello que la destaca”.
“Estamos en un momento de oportunidad, para afrontar desafíos y deudas pendientes, y hoy estamos avanzando más que nunca, hemos recuperado el 15 por ciento que durante años los gobiernos nacionales fueron retrayendo, también tenemos un reclamo por la deuda, que si pudiéramos contar con ese dinero podríamos avanzar mucho más rápido en planes de urbanización”, reconoció Lifschitz.
"En Rosario siempre se priorizaron los intereses colectivos por sobre los particulares, sin negociados, con transparencia y objetivos a mediano y largo plazo, consensuados con la sociedad civil; tenemos que promover el desarrollo y el crecimiento de la provincia, y eso depende de nuestro propio esfuerzo”, reafirmó.