Para el fiscal de la causa, Gerardo Pollicita, existió un plan criminal destinado a dar ayuda que le permitiera dotar de impunidad a los iraníes acusados de volar la sede de la mutual judía. Todo esto en desmedro de los intereses de las víctimas y el esclarecimiento del ataque terrorista. El accionar delictivo denunciado por el fiscal Alberto Nisman habría sido orquestado y puesto en funcionamiento por las altas autoridades del anterior gobierno.
El medio elegido para concretar el plan fue el Memorándum de Entendimiento con Irán. Al igual que Fernando Esteche, Alejandro Khalil y Bogado, D'Elía habría intervenido en los canales paralelos de comunicación y negociación, que, según la acusación, fueron necesarios para avanzar con el objetivo criminal.