Otro de los puntos a favor, es que gracias a este sistema, las personas que no son admitidas directamente no viajan y no deben volverse al país de origen por la aerolínea que los trasladó.
En nuestro país el sistema próximamente se habilitaría y de llevarse a cabo previamente habría que habilitar una zona especial para que los pasajeros que viajan a norteamérica puedan hacer la consulta. También, se deberá contar con personal de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos.
Luego de realizar el check-in, pasar por seguridad y hacer el trámite de migraciones argentina, los pasajeros deben realizar otra fila para vuelos con destino a los Estados Unidos. Allí los oficiales estadounidenses harán el mismo chequeo que se realiza en territorio norteamericano, pero desde nuestro país.