Apuntó, además, que en la Provincia unas 2.000 personas son dializadas y que esta determinación es "altamente preocupante, y peligrosa, porque pone en riesgo la salud de los afiliados al PAMI, para quienes la diálisis es sinónimo de vida".
En el comunicado, la asociación señaló que con esta situación "se resentirá sensiblemente la capacidad de compra de medicamentos e insumos, así como también el pago de sueldos al personal de los Centros de Diálisis".
Además, apuntaron que los insumos que se utilizan son en su mayoría importados y se pagan a valor dólar, y que, además, en el país aumentaron un 400 por ciento. "No estamos dispuestos a admitir este nuevo recorte.
Bajo las reglas de juego que las autoridades nacionales pretenden establecer, no es posible brindar las prestaciones. Sólo se pondrá en riesgo la vida de los adultos mayores que se verán afectados por esta decisión", advirtió el documento.
Finalmente, indicó que "el riesgo que implica un nuevo ajuste al sector es el límite entre la vida y la muerte para los 830 afiliados al PAMI, en su mayoría adultos mayores, que son asistidos en los 43 Centros de Diálisis Crónicas que hay en Santa Fe.