“Hoy le será dado el premio nobel de la Paz a la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares. Ese reconocimiento se da en coincidencia con la Jornada Mundial de las Naciones Unidas por los Derechos Humanos”, destacó durante el Ángelus en la plaza de San Pedro. Esa coincidencia, explicó, “subraya los fuertes lazos entre derechos humanos y el desarme nuclear”.
“De hecho, esforzarse por la tutela de la dignidad de las personas, en modo particular de los más débiles y desaventajados, significa también trabajar con determinación para construir un mundo sin armas nucleares”; exhortó el Papa.