Se montará un nuevo operativo de seguridad que incluirá el refuerzo de 1700 policías, quienes se dedicarán a garantizar el orden y el óptimo desarrollo de las próximas actividades festivas.
Se trata de un complemento en seguridad al trabajo diario que ya realiza la Policía de la Provincia de Buenos Aires en cada una de sus jurisdicciones, con el condimento de posibles intentos de manifestaciones frente a centros comerciales.