La secretaria de Desarrollo Social del municipio, Laura Capilla, viajó a Buenos Aires para gestionar en persona cupos de "Argentina Trabaja”, un programa muy exitoso que desde 2009 se transformó en una herramienta de inserción para aquellos sectores excluidos del mercado laboral.
Las plazas para Rosario nunca llegaron durante la presidencia de Cristina Fernández. El municipio denunció en aquellos años una "clara discriminación" por no estar alineados con la política oficial. La gestión de Cambiemos prometió dejar atrás la marginación a partir de una "comunicación más fluida".
Capilla y su equipo mantuvieron varias reuniones en 2016 para definir los programas a implementar. Los funcionarios nacionales pidieron tiempo y patearon los acuerdos para el 2017. La funcionaria local se reunió en marzo con el jefe de Gabinete de la Secretaría de Economía Social de la Nación, Juan Pablo Niño, para no dilatar más los tiempos.