"Está probado de manera irrefutable que Caputo era dueño de un conglomerado de offshores que manejó más de 300 millones de dólares en negro, y además nunca lo incluyó en sus declaraciones juradas", remarcó Tailhade en su denuncia.
"Queda comprobado que el ministro Caputo era accionista de dos compañías y que era dueño de una gerenciadora de fondos de inversión en Miami. Esta información surge de documentación oficial de la Securities and Exchange Commision (SEC), la Comisión Nacional de Valores de los Estados Unidos, a la que accedieron", detalló.