El Gobierno salió al cruce de las expresiones del ex juez de la Corte Suprema y actual miembro del organismo internacional, a través de una carta que el canciller dirigió al Presidente del tribunal internacional, Eduardo Ferrer Mac Gregor.
Respecto a la denuncia, Faurie consideró que "espera encontrar la debida consideración por parte de esa Corte Interamericana de Derechos Humanos en el marco de la potestad disciplinaria que le es propia".
En la misiva, Faurie por intermedio de la presidencia se dirigió a los integrantes de la CIDH, "para transmitirle el rechazo del Gobierno argentino" a las expresiones de Zaffaroni, como miembro de esa Corte.
En ese sentido, aseguró que los dichos del magistrado son "incompatibles con la conducta que deben observar quienes ostentan la alta función jurisdiccional internacional de ese Cuerpo, siendo que además ellas expresan posiciones antidemocráticas y que atentan contra el estado de derecho".