La decisión fue adoptada por el CNE pocas horas después de que se diera por concluido, sin acuerdo, el diálogo político que el oficialismo y la oposición habían iniciado el 1 de diciembre pasado en Santo Domingo.
Las partes habían admitido coincidencias en cinco de los seis puntos de la agenda del diálogo pero no pudieron alcanzar consenso acerca de las elecciones presidenciales. La oposición reclamaba -y el oficialismo rechazó- que se reabriera el padrón para permitir el registro de nuevos votantes y que se cambiara la composición del directorio del CNE, controlado por el chavismo, como modo de garantizar imparcialidad en la competencia.