La ley original impedía esta situación, que fue modificada en el decreto reglamentario emitido por Macri. Solá, entonces, consideró que el Presidente vulneraba el espíritu de la ley y que lo hacía “para que su padre pueda blanquear plata”.
“El niño mimado quiere que su papi pueda blanquear”, ironizaba por entonces Solá, indignado contra un decreto que, afirmaba, era “violatorio de este Parlamento, de la Constitución, de toda ética, y estoy seguro que a la mayoría de su bloque le da vergüenza”.
El tiempo le daría la razón a Solá, luego de que denunciara que en agosto pasado el hermano del presidente, Gianfranco Macri, blanqueó nada menos que 35 millones de dólares. Algo que incluso el propio Mauricio Macri se encargó de “sincerar” en una conferencia de prensa.
En dicho blanqueo, también participaron Nicolás Caputo, el empresario y amigo íntimo del presidente, entre otros familiares de funcionarios, como el primo del jefe de gabinete, Marcos Peña. Solá acudió a la justicia con ese planteo, que fue rechazado en primera instancia por “falta de legitimidad”. Ahora, la Sala V, en un fallo dividido, le permitió participar del proceso.
“Fallo a favor mio de la Camara. Puedo ser litigante contra el Decreto inconstitucional que les permitió blanquear a familiares de funcionarios. Ahora, la cuestión de fondo. AFIP debe recuperar plata mal habida. Todos los que trabajan y pagan impuestos son burlados en su esfuerzo”, celebró en Twitter el diputado del Frente Renovador.