La inflación mayorista da cuenta de las subas en los insumos de la economía: esos aumentos golpean sobre los valores minoristas. Esos incrementos van de la mano con la devaluación que de modo gradualista el Gobierno de Cambiemos está llevando adelante desde diciembre del año pasado.
En tres meses, el peso se devaluó casi un 12% (costaba 17,50 a principio de diciembre de 2017). Con ese panorama de fondo, es muy factible que otra vez los trabajadores (formales e informales) vuelvan a perder poder adquisitivo en 2018 (en 2016 perdieron en 7 y 10 puntos).
Presionados por el oficialismo, muchos gremios están cerrando paritarias del 15% y sin cláusula gatillo. ¿De cuánto será la inflación anual? Si la tendencia de los primeros meses se extiende, la suba de precios volverá a estar en torno al 20%.