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Y reflexionó: “La posición de la Iglesia es dogmática, no hay renuncia a lo que piensa ni va a haber nada que la conforme. Pero indudablemente también hay un crecimiento en el mundo moderno de los derechos individuales y de las mujeres en decidir sobre su cuerpo”.
El titular del interbloque Argentina Federal dijo además que “todavía” no definió su postura, pero deslizó que tiene “una visión abierta y más laica de la toma de decisiones”.
Luego, se preguntó “¿qué hubiera pasado si el papa Francisco en vez de haber ido a Chile hubiera venido a la Argentina y hubiera hecho una gran convocatoria pastoral, humana y religiosa? No sé si estábamos discutiendo este tema”.
En ese sentido, expresó que “más allá de la legitimidad del colectivo social que impulsa” la discusión, hay “un poco de decisión del Gobierno, después de haber analizado focus group sobre ‘qué pasó con el papa que no vino’”.
Y completó: “Y también utilizar este tema como telón de fondo de algunas cuestiones transcendentes que están pasando en la economía o situaciones que se vivieron con algunos funcionarios”.
