"Los movimientos del tipo de cambio influyen en el resto de las variables macroeconómicas. En primer lugar, aceleraron la inflación" explicaron. El argumento principal para sostener que el salario volverá a perder con la inflación es que "este año hubo mayores subas de la cotización de la divisa y de tarifas, mientras que los aumentos salariales fueron más acotados".
El desmanejo del Gobierno con la inflación podría llegar cuando a mitad de año se sitúe el número a solo tres dígitos de la meta del oficialismo. Algo que hacer prácticamente imposible que se cumpla lo fijado por el Gobierno.