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Se encontró una radiobaliza que podría ser del submarino extraviado

El 22 de noviembre de 2017, siete días después del último contacto del ARA San Juan con tierra, un audio comenzó a circular en las redes sociales. Se trataba de una supuesta comunicación entre el destructor “Almirante Brown” (Meko 360) y la corbeta “Spiro” (Meko 140) en la que se informaba el hallazgo de “una boya triangular con radiobaliza y cable de acero adosado al fondo”.

Por aquellos días, la Armada negó la veracidad del audio y el vocero de la fuerza naval, Enrique Balbi, repitió en varias oportunidades que la radiobaliza del ARA San Juan “nunca se activó”.

Cuando se lo llamó a testimonial y se le consultó por este hallazgo, Balbi sostuvo: “No tengo conocimiento de ello”. Sin embargo el audio es real. En los allanamientos a la Base Naval Mar del Plata y en Puerto Belgrano, ordenados por la jueza Marta Yáñez, se encontró un documento que abre una nueva línea investigativa en el caso. Se trata de una anotación en el libro de guardia que coincide con los datos vertidos en el audio.

El escrito, describe el hallazgo de una radiobaliza, elemento que se usa solo en situación de emergencia para requerir ayuda y establecer posición satelital. “Encontrado boyarín rojo con radiobaliza y cable conectado al fondo N° 9448588-1 Lote 170706”, detalla la anotación. Y continúa: “N° 25 escrito en grande con marcador rojo”.

En el papel, además, se describe la posición de la boya: 42° 24,6 S O58° 19,7 W. El mismo lleva la firma de Mario Ramón Polo, suboficial primero de comunicaciones, Ricardo Sebastián Díaz, cabo principal de comunicaciones y el Capitán de Corbeta, Julio César Correa.

La anotación deja en claro que la información fue enviada al Comando de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada (COAA). En febrero, la jueza requirió a la base de Puerto Belgrano que otorgue información sobre el hallazgo de la radiobaliza.

Es que durante noviembre de 2017 no se reportó otro caso SAR (búsqueda y rescate, en inglés) que no corresponda al del submarino, por lo que la detección del elemento abrió un interrogante en la causa, que solo la fuerza naval puede responder.

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