El propio Gobierno adhirió a las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), encargadas de regular los balances presentados por las empresas que cotizan en Bolsa en todo el mundo, la cuales dicen claramente que cuando se alcanzan más de 100 puntos inflacionarios en un lapso menor a los tres años, se debe disparar la alarma para que las compañías radicadas puedan ajustar sus estados contables para lidiar con la distorsión en los precios.
Además, en el mundo existen dos organismo, encargados de lo mismo, que definen sus resultados en base a otro conjunto de criterios pero que la los 100 puntos inflacionarios ya son determinantes: el Financial Accounting Standards Board (FASB) de Estados Unidos y el International Accounting Standards Board (IASB) de Londres pero con influencia al resto de Europa.
Según asegura Página/12, "este último adoptaría a corto plazo la misma resolución que el FASB, anticiparon fuentes de multinacionales radicadas en la Argentina". "Las mayores auditoras contables internacionales ya le empezaron a indicar a sus clientes que deberán ajustar sus balances por hiperinflación para incluir la información en los reportes que llegan a inversores de todo el mundo", completó el diario.