El Gobierno dice estar preocupado por la creciente inflación, pero sin dudas los incrementos de cuestiones tan vitales como la energía eléctrica y los combustibles traerán más aumentos detrás y el techo del 30% estimado por economistas para el 2018 podría perforarse.
Al respecto ya se estima que la inflación del me de julio que termina estará en torno al 2,8% o quizás el 3%. Si bien por el momento se pudo contener el alza del dólar, se lo hizo allá lejos, por los $28, cuando en diciembre no superaba los $20.
El rumbo de la economía para el 2019 sin dudas será vital para el destino de las elecciones. El ajuste prometido al Fondo Monetario Internacional y la obligación de bajar drásticamente el déficit fiscal sin dudas serán factores a tener en cuenta en el Gobierno si pretende tener aspiraciones a una reelección presidencial, por eso analistas estiman que acumularán en lo que resta del año la mayor cantidad de medidas impopulares que quedan por delante para el siguiente período.