Los pormenores los explicarán en las próximas horas el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, junto con el secretario de Participación Público Privado, José Morea; el presidente del Banco Nación, Javier González Fraga; y el procurador general del Banco Nación, Javier González Fraga.
Se estima que el dinero fideicomitido alcanzará los 1.000 millones de dólares, con el objetivo de cubrir los próximos doce meses de obra pública. El Banco de Inversiones y Comercio Exterior (BICE) obtendrá los fondos de las entidades financieras privadas, que no quieran aportar en un sector que está siendo investigado por la Justicia.
De esta forma los bancos le prestarán el dinero al fideicomiso y no directamente a empresas. Ya Dietrich le había adelantado al diario La Nación, que el fideicomiso busca “eliminar el riesgo reputacional” que generaron los cuadernos K. Pero si bien será el BICE quien administre los fondos, el fideicomiso será del Ministerio de transporte.