El letrado le recomendó que autorice los allanamientos. “Le planteé que si quieren allanarle la casa, que les abra las puertas bajo la condición de humanidad, que si quieren filmar y sacar fotografías de sus cajones íntimos, no“, expresó.
Las viviendas en cuestión son el departamento de Uruguay al 1300, en el barrio porteño de Recoleta, y la casas en Río Gallegos y El Calafate respectivamente, en Santa Cruz. “Le planteé no esperar el permiso del Senado, que ella colabore con la Justicia, si total no hay absolutamente nada que esconder“, agregó.
Advirtió: “Utilizan esta cuestión del allanamiento a la ex presidenta por una cuestión de noticia nacional e internacional”. Y aseguró: “Yo entiendo que los gobiernos son corruptos, lo que no voy a sostener es que, conociéndola a Cristina, jamás ella pudo haber estado metida en cualquier circunstancia que tenga que ver con la corrupción“.
Por último, contó que le sugirió a Cristina que ponga ciertas “condiciones”, entre ellas “el decoro a que es una mujer viuda, el decoro hacia sus cosas íntimas, porque nadie va a querer ver las cosas íntimas de Cristina, la ropa interior, el ropero, los zapatos, que no haya fotografías, que no haya filmaciones”.