La continua seguidilla de errores se tradujo en cuatro goles convertidos en dos partidos. Pese a estos números, si un jugador de la última línea se destacó sobre el resto fue Paredes. El Pelado llegó al Parque con bajo perfil, pero tras un discreto encuentro ante Vélez, cumplió frente al Rojo, sacando varias pelotas complicadas.
Y ahora que tenía la posibilidad de asentarse definitivamente en el equipo, y ensamblarse mejor con su compañero de zaga Fabricio Fontanini, se perderá esa posibilidad.