A las 9.38 sonará la sirena y luego se leerá un discurso. La causa penal tiene un sólo querellante. Se trata de la familia de Débora Gianángelo, cuyo hermano Adrián ratificó su interés por ir hasta las últimas consecuencias, a pesar de que los otros familiares decidieron no continuar. A fines de junio concluyó la pericia para establecer las causas del siniestro fatal.
El informe del trabajo sobre restos de las instalaciones de gas rescatadas entre los escombros de los edificios ya está en manos del juez donde se tramita la causa penal, Ismael Manfrín. Ahora se deberá sortear a los jueces que estarán al frente del juicio oral donde se juzgarán las responsabilidades de los once imputados por el siniestro.