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El Frente para la Victoria, convertido en Unidad Ciudadana sabe que su líder, Cristina Fernández de Kirchner tendrá varias causas abiertas y juicios que podrían complicar su candidatura e incluso llevarla a la cárcel. Por eso, tomando nota de los acontecimientos por venir, piensan en el ex gobernador bonaerense para que busque una revancha ante Macri.
Scioli perdió por apenas un punto en 2015, cargaba con una mochila de 12 años de kirchnerismo explícito, con buenas y malas. Pero además enfrentaba a un candidato impoluto, que lleno de promesas incumplida venía a proponer esperanza, cambio y abría una esperanza de mejoras que finalmente no sucedieron.
Especulan que la confrontación con Macri -Scioli hoy podría ser distinta. Que simplemente con algunos spots publicitarios reviviendo aquel debate presidencial y con la posibilidad cierta de un nuevo enfrentamiento estipulado por ley, Scioli saldría vencedor. Por eso, a pesar que la línea dura del kirchnerismo no quiere otro candidato que Cristina, saben que las posibilidades crecen sustancialmente.
El propio macrismo buscará que el candidato peronista sea de aquellos aliados, lo que llaman el peronismo pensante. Pichetto, Urtubey, Massa y hasta Solá aparecen en este espacio, pero cuentan con votos macristas, y no seducen al sinpatizante justicialista. Scioli ha mantenido un perfil bajo, no se metió de lleno en debates comprometedores, no quiso sacar la cabeza, ya que el macrismo guardaba carpetazos para acorralarlo judicialmente.
El legislador Scioli volvió a aparecer nuevamente en el escenario electoral, las conversaciones ya comenzaron, por ahora son secretas, pero se irán incrementando a medida que pasen los días, las situación judicial de Cristina empeore y la economía siga el rumbo esperado, de un plan económico pensado para unos pocos.
