La secretaria de Movilidad, Mónica Alvarado, aseguró que esto “se trata de un abandono por parte del gobierno al transporte de cada provincia. Están diciendo ‘que cada uno se arregle’”.
Si el mencionado subsidio no se reemplaza, su quita podría significar un aumento del 80% en la tarifa interurbana y un 90% del boleto urbano en Santa Fe y Rosario.
Si todo eso se traslada al bolsillo del usuario, cosa que desde la Provincia intentarán evitar, el boleto podría llegar a 30 pesos. “Entendemos que será desde el año próximo, pero queremos dialogar y conocer el detalle”, expresó la funcionaria municipal.