Las tarifas que los clientes pagaron entre abril y septiembre de 2018, se regían por un tipo de cambio que rondaba los 20 pesos, pero durante los últimos meses del año, el dólar osciló entre los 28 y 38 pesos. Eso generó que las distribuidoras contrajeran una deuda de $10.000 millones.
Por esa razón, y luego de un debate como sobre cómo saldar ese monto, la Secretaría de Energía decidió que a partir de enero de 2019, los usuarios deberán afrontar ese extra y pagarlo en 24 cuotas consecutivas.
Según detalla el Boletín Oficial: “Las diferencias (…) serán distribuidas por las prestadoras del servicio de distribución a cada usuario proporcionalmente, tomando en consideración los volúmenes consumidos por éstos durante el período abril-septiembre de 2018”.
Además, comenzó a regir un nuevo cuadro tarifario para el interior: en algunas regiones las subas son incluso superiores a las de Buenos Aires. Es el caso de Mendoza y Córdoba, donde el precio del gas domiciliario se duplica en octubre con respecto a marzo.