En esta ocasión, la provisión fue de 316.000 comprimidos de metadona de 5 miligramos y 2.370.000 comprimidos de morfina de 10 miligramos, en el marco de un programa de suministro de este tipo de fármacos a nivel nacional coordinado por el Instituto Nacional del Cáncer.
La metodología de entrega es centralizada: la medicación llega desde el LIF al Banco Nacional de Drogas Oncológicas y desde allí se distribuye a distintos puntos del país.
En la primera etapa de este programa piloto, que duró desde 2014 a finales de 2016, la metodología fue distinta, ya que el LIF por pedido de expreso del INC se encargó de realizar una entrega puerta a puerta a lo largo de todo el país, suministrándose más de un millón de comprimidos de las dos drogas citadas.
La intervención conjunta del LIF y el INC en este programa comenzó cuatro años atrás. Desde entonces, el laboratorio público santafesino viene desarrollando su producción a medida de la demanda efectuada por el organismo nacional, en cuanto a su presentación y composición, a partir de las necesidades expresadas por los distintos profesionales médicos a lo largo del país, en coordinación con el INC.
Los medicamentos producidos por el laboratorio estatal santafesino son destinados a pacientes de hospitales con enfermedades terminales o críticas, como el cáncer en sus distintos tipos. Los nosocomios que atienden estas demandas desarrollaron áreas de cuidados paliativos para morigerar el dolor que generan estas enfermedades.
El programa suscripto oportunamente y coordinado por el Instituto Nacional del Cáncer llega a este tipo de efectores entrenados en el manejo y administración de la medicación provista por el LIF. En esta línea de tratamientos farmacológicos para una determinada patología, el Estado nacional desde 2014 a través del INC, ha apostado a la producción pública logrando costos por debajo de un tercio o la mitad de lo que salen estos medicamentos en el mercado.
A través de una licitación nacional, el LIF logró ser el oferente en este rubro, producto del beneficio económico en cuanto a la reducción significativa de precios en este tipo de fármacos hechos a medida. El gobierno de Santa Fe y el Ministerio de Salud de la provincia consideran que estas enfermedades deben ser abordadas en el marco de una política pública del Estado provincial, ocupando lugar prioritario y específico dentro de la agenda sanitaria.
En aras de ese objetivo, tanto el LIF como la Agencia de Control del Cáncer y otras áreas sanitarias santafesinas vienen desarrollando acciones coordinadas que ponen de manifiesto la centralidad de las políticas públicas en la prevención y tratamiento de estas patologías, en beneficio de la población local y nacional.