El análisis señaló que el mercado de trabajo ya empezó a sentir los "primeros impactos de la crisis" económica que desde abril golpea a la Argentina. El estudio destaca que en sólo cuatro meses se destruyeron 97.400 empleos registrados, de los cuales casi 34.000 puestos de trabajo son del sector formal privado, aquellos de mayor calidad y salario.
A su vez, el desempleo ascendió al 9,6%, por lo que se incrementó 0,9 punto porcentual en un año. "Los números revelan que los primeros impactos de la crisis económica se reflejan tanto en una pérdida de puestos de trabajo como en un incremento de la precarización laboral", dijo el estudio. Según el CEPE, "la informalidad alcanza el 34,3% en la comparación interanual, reforzando la tendencia en alza de precarización laboral que sufren los trabajadores".